Lo Bueno del Caos!

Después del día ajetreado con los sobrinos, me dispuse a recoger las secuelas del huracán de las andanzas de los bebés por toda la casa. Pero de pronto, miré con horror que dos de los entrepaños del clóset estaban totalmente caídos; entrepaños donde había guardado todos los libros que me heredó mi abuela, que fueron la colección de el erudito de mi abuelo, que se la pasó la mayor parte de su vida recopilando libros de cualquier tipo, forma, tema, origen y antigüedad. "OH, MI DIOOSS!!! OH, MI DIOOOSS!!", hasta la tercera vez me di cuenta todas las veces que había repetido esa frase... Esos libros son un gran tesoro que poseo y he estado esperando tener un medio de transporte para traerme el mueble enorme con el que me los regaló mi abuela, y que no he podido traérmelo a la casa.



Me imaginaba todos los libros delicados de antaño y colección, apachurrados y dañados. Pronto dejé todo lo que tenía de un lado, y me puse a rescatar lo antes posible todos los valiosos libros. Mientras ordenaba los libros, aproveché en reordenar el clóset, encontrándome otras fantásticas y perdidas cosas. Le dejé a mi mamá dos entrepaños completos para sus cosas. Los dedos me quedaron sucios y polvozos. Pero después, admiré con emoción, como cuando el pirata descubre su anehlado tesoro, cinco libros de cuentos infantiles de antaño. Fábulas y cuentos de hadas franceses, del tíbet y españoles. ¡Qué tesoro! De inmediato imaginé a mi hermana leyéndoles los fabulosos cuentos a sus tres hijitos, antes de dormir...
Y entonces, pensé: "...no cabe duda que siempre viene algo bueno de lo que parece un caos!"